Las Brechas (Gaps) en los Mercados Financieros
¿Qué son los gaps o brechas en el mercado?
Una brecha o gap en el mercado, esencialmente se observa en el gráfico de precios como un espacio vacío entre un periodo de negociación y el periodo de negociación anterior, es decir un área en el gráfico en que no hubo transacciones. Dicho de otra forma, los gaps se ven como saltos de un nivel de precios a otro. Dependiendo del mercado, normalmente, esto ocurre entre el cierre del mercado de un día y la apertura del mercado del día siguiente (en el caso del Forex los gaps suelen producirse entre el cierre del viernes y la apertura apertura del día lunes ya que este mercado opera de lunes a viernes las 24 horas del día).
Las brechas en el precio aparecen más frecuentemente en gráficos diarios, en donde cada día presenta una oportunidad para crear un gap de apertura. Los gaps en gráficos semanales o mensuales son mucho más raros: el gap tiene que producirse entre el cierre del viernes y la apertura del lunes para que quede registrado en un gráfico semanal y entre el último día del cierre del mes y el primer día del siguiente mes para que aparezca en un gráfico diario.
Un gap en el mercado ocurre cuando existe una diferencia suficientemente grande en el precio de apertura de un periodo de negociación en el cual el precio y los movimientos subsecuentes del mercado no caen dentro del rango del periodo de negociación previo. Por ejemplo, si el precio de la opción de una compañía cerró a $44.50 en una sesión y en la sesión del mercado del día siguiente abre a $43.00, entonces habrá un importante gap o brecha bajista en el gráfico entre estos dos periodos, tal como se muestra en la siguiente figura:
Muchas cosas pueden ocasionar brechas en el precio, como por ejemplo un evento de suma importancia que afecta de forma decisiva al mercado, tal como una noticia política o económica relevante. En el caso del mercado de valores, un reporte de ganancias que se publica después de que el mercado ha finalizado la sesión diaria puede ocasionar un gap. Si las ganancias fueron mucho mayores de lo esperado, muchos inversores pueden colocar órdenes de compra para el día siguiente. Esto puede ocasionar que el precio abra a un nivel más elevado al precio de cierre del día previo. Ciertamente los gaps pueden ofrecer evidencia de que algo importante ha pasado con los fundamentos y/o la psicología de masas que acompaña este movimiento del mercado. De hecho, los distintos tipos de gaps evidencian diferentes condiciones y estados de ánimo del mercado tal como veremos más adelante.
Las brechas pueden ser identificadas con facilidad en gráficos de barras y en gráficos de candelas, pero no pueden ser vistas en gráficos de líneas ni en gráficos point-and-figure. La razón es que cada punto en los dos tipos de gráficos anteriores están conectados.
Se dice a menudo cuando se habla de las brechas en el precio, que siempre terminan por llenar, lo que quiere decir que el precio acaba por retroceder y llega al menos a cubrir el espacio vacío en el precio. Sin embargo, antes de tratar de aprovechar estos posibles movimientos de cobertura cada vez que vea un gap, el trader tiene que comprender que esto no siempre sucede y cuando ocurre a veces puede transcurrir algún tiempo antes de que la brecha sea cubierta.
Los gaps y las zonas de congestión
Para comprender las brechas en el precio, el trader tiene que entender la naturaleza de las zonas de congestión en el mercado. Una zona de congestión es solo un rango de precios en el cual el mercado se ha mantenido sin mayores cambios por un periodo de tiempo determinado en el cual las fuerzas de compra y venta han permanecido igualadas, y que en algunos casos puede durar unas cuantas semanas o más. El área alrededor de la parte alta de la zona de congestión usualmente actúa como resistencia cuando el precio se aproxima por debajo. De la misma manera, el área cerca de la parte baja de la zona de congestión actúa como soporte cuando el precio se acerca desde arriba. Para que el precio pueda atravesar una de estas áreas de soporte o resistencia, se requiere un nivel elevado de entusiasmo en el mercado y ya sea, muchos más compradores que vendedores para los rompimientos alcistas o más vendedores que compradores para los rompimientos bajistas.
En muchas ocasiones, los gaps alcistas y bajistas se producen precisamente por el rompimiento de las resistencias o soportes de las zonas de congestión debido a diversos factores los cuáles estudiaremos más adelante. Cuando ocurre un gap, puede producirse un aumento del entusiasmo en el mercado así como un incremento del volumen de compradores o vendedores los cuáles impulsan el precio con fuerza inusitada en una dirección específica y a través de una zona de congestión. Cuando analicemos los distintos tipos de gaps, veremos como algunos de los movimientos más importantes en el mercado pueden producirse a partir de gaps en los que se producen rompimientos de zonas de congestión.
Tipos de brechas en el mercado
Existen cuatro tipos básicos de gaps:
- Gaps Comunes
- Gaps de Ruptura
- Gaps de Escape
- Gaps de Agotamiento.
Cada uno de estos tipos de gaps son iguales en estructura, y difieren solamente en su ubicación en la tendencia y en su significado subsecuente para los analistas gráficos.
Gap Común
Tal como su nombre lo indica, el gap común se produce a menudo en los movimientos del precio en el mercado, es decir que se trata del tipo más común de brecha en el precio. Por esta razón, no es tan importante ni tiene tantas implicaciones para los traders como otros tipos de gaps, sin embargo, siempre debe ser considerado.
Este tipo de gaps normalmente se produce cuando el precio de un activo se mueve en un rango de precios o está en un periodo de consolidación, y usualmente es pequeño en términos del movimiento del precio del gap. Pueden producirse como resultado de acontecimientos que ocurren comúnmente, como por ejemplo los periodos donde hay bajo volumen de negociación, y en los cuales un ingreso repentino de liquidez (debido a una compra o venta masiva) puede ocasionar un salto en el precio al alza o a la baja. En los mercados de valores, no es raro que ocurra un gap común después del anuncio de una división de acciones o cuando una acción alcanza la fecha ex-dividendo y en ese momento el volumen de negociación es bastante bajo.
Estos gaps a menudo son cubiertas rápidamente, de tal forma que el precio termina por regresar al rango de precios en donde estaba antes de que se produjera la brecha.
Como ya indicamos, un gap común común por lo general aparece en un rango de precios o zona de congestión, y refuerza la aparente falta de interés en el mercado y en el activo en ese momento. Muchas veces esta condición se agrava aún más por bajo volumen de las operaciones. Ser consciente de este tipo de gaps es necesario para el trader ya que en algún momento los va a encontrar, pero al mismo tiempo es dudoso que los gaps comunes puedan producir oportunidades de negociación tan buenas como las que ofrecen otros tipos de brechas en el precio, aunque no por eso deben ser descartados.
Gap de ruptura
Un gap de ruptura usualmente se produce al inicio de un movimiento del mercado, por lo general, después de que el precio se ha movido en un patrón de consolidación, lo que ocurre cuando el precio se encuentra sin tendencia dentro de un rango definido. Se le conoce como gap de ruptura, debido a que la brecha cambia al precio del activo de tal manera que pasa de estar en un patrón sin tendencia a un patrón de tendencia alcista o bajista. En otras palabras, se producen cuando la acción del precio está rompiendo fuera de un rango de precios o zona de congestión.
Un gap de ruptura fuerte que saca al precio de un periodo de consolidación es considerado como un movimiento de mayor fortaleza en comparación con un movimiento de salida del rango que haya ocurrido sin un gap. Este tipo de gap es una señal que indica un gran incremento en el sentimiento del mercado en dirección de la brecha, el cual tiene alta probabilidad de durar un periodo más o menos prolongado, lo que puede llevar a un movimiento más extendido.
La fortaleza de estos gaps (y la fiabilidad de sus señales) puede ser confirmada cuando se analiza el volumen de negociación durante la brecha. Entre mayor sea el volumen del gap (durante y después de la formación de la brecha), mayor es la probabilidad de que el movimiento del precio va a continuar en la dirección del gap, lo que también reduce las posibilidades de que el precio retroceda nuevamente y termine por “llenar el gap”.
Cuando se produce un gap de ruptura, el volumen sube significativamente, no solo por el aumento del sentimiento alcista o bajista en el mercado, sino también debido a que muchos traders mantienen posiciones en el lado opuesto al rompimiento y necesitan cubrir esas operaciones a la mayor brevedad posible para limitar las pérdidas. De hecho, es mejor que este volumen de negociación no se comprometa hasta que se produzca la brecha. Esto significa que el nuevo cambio en la dirección del mercado tiene una mayor probabilidad de continuar.
Aunque el gap de ruptura usualmente no termina por llenarse tal como el gap común, en ocasiones si o hace aunque esto puede tomar mucho más tiempo. Por eso, no debemos caer en la trampa de pensar que si este tipo de brechas está asociado con un volumen elevado, entonces será llenado en poco tiempo. Cuando observamos un gap de ruptura, debemos tomar como un hecho casi seguro que ha iniciado una nueva tendencia en dirección del movimiento y por lo tanto nuestras operaciones deben estar adaptadas a esta realidad.
Además, este gap normalmente se convierte en soporte o resistencia para el movimiento resultante. El punto de rompimiento ahora es un nuevo soporte (para un rompimiento alcista) o resistencia (para un rompimiento bajista) del precio. En el caso de un gap de ruptura alcista, el punto mínimo de la segunda candela actúa como soporte del precio. Por su parte, en un gap de ruptura bajista el precio máximo de la segunda candela actúa como resistencia para cualquier movimiento de retroceso alcista.
En síntesis, el gap de ruptura es una buena señal de que una nueva tendencia se ha iniciado.
Las brechas en el precio tienen mayor fiabilidad si están asociadas con patrones gráficos clásicos ya que estas formaciones ayudan a su confirmación y refuerzan sus señales. Por ejemplo, si un triángulo ascendente de repente experimenta un gap de ruptura alcista, esto representa una señal de apertura de una posición alcista mucho más fuerte y fiable en comparación con un gap alcista que no cuenta con ningún patrón gráfico clásico asociado como el anterior. El siguiente gráfico muestra un triángulo ascendente normal (línea superior horizontal con una línea inferior de tendencia alcista) con un gap de rompimiento alcista, tal como se esperaría en un triángulo ascendente.
Gap de escape o de continuación
Los gaps de escape, también conocidos como gaps de continuación, son mejor descritos como brechas en el precio causadas por un incremento en el interés por el activo. Por lo general, el gap de escape se produce alrededor de la mitad de una tendencia, usualmente después de que el precio ya ha realizado un movimiento fuerte (suelen producirse hacia la mitad del movimiento esperado después del gap de ruptura). Esta brecha en el precio es una señal clara que indica que la tendencia actual tiene altas probabilidades de continuar, ya que muestra que el interés en el activo se mantiene e incluso se está incrementando. En ocasiones, se producen varios gaps de continuación prácticamente uno después de otro, lo que es señal de la fortaleza del movimiento, y debe interpretarse como una señal clara de continuidad de la tendencia.
Dado que en teoría el gap de escape ocurre cerca de la mitad de la tendencia, esto puede utilizarse como una forma de decidir cuanto va a durar aproximadamente una tendencia alcista o bajista.
Después de que el precio ha realizado un movimiento importante en el mercado, muchos traders que se mantuvieron al margen esperando por un mejor punto de entrada o de salida, deciden que este punto ideal probablemente no se va a presentar y por lo tanto si siguen esperando más tiempo, van a terminar perdiendo una buena oportunidad. Es este incremento en la compra o venta del activo lo que produce el gap de escape y la continuación de la tendencia.
Por ejemplo, en el caso de los gaps de escape alcista, usualmente se producen por los traders que no entraron al mercado durante el movimiento inicial de la tendencia alcista y mientras esperaban a que ocurriera un retroceso en el precio, decidieron que este nunca iba a ocurrir. Por lo tanto, aumenta de manera súbita y significativa el interés por la compra del activo, y se forma una brecha arriba del precio de cierre del periodo anterior. Así mismo, una buena tendencia alcista puede tener gaps de escape causados por noticias y eventos significativos que generan un interés renovado en el activo. En el gráfico que se muestra a continuación, podemos notar el aumento en el volumen de negociación durante y después de un gap de escape.
Por supuesto que los gaps de escape también ocurren en las tendencias bajistas. Cuando se produce una brecha de este tipo en una tendencia a la baja, por lo general representa un incremento significativo en las transacciones de venta que, en este caso, son realizadas por traders y compradores que se mantuvieron fuera del mercado mientras este bajaba. Muchos traders que se mantuvieron al margen del movimiento bajista estaban esperando a que ocurriera un retroceso alcista del precio para entrar a favor de la tendencia, y al final decidieron que esto nunca se iba a producir. También tenemos a los compradores que tenían posiciones de compra y que estaban a la espera de que el mercado comenzara a subir para recuperarse de las pérdidas. Debido a que ambos grupos de traders decidieron que el precio no iba a subir, comenzaron a vender de forma masiva. Esto puede convertirse rápidamente en una situación seria dado que aquellos que tienen posiciones de compra en el activo eventualmente entrarán en pánico y empezarán a vender para cerrar sus posiciones. Dado que todos están vendiendo, no hay a quien vender ya que no hay compradores y el precio continúa cayendo y forma una brecha a la baja para encontrar compradores. Ciertamente una situación totalmente destructiva para los que se encuentran en el lado alcista del mercado cuando se produce un gap de escape bajista.
A pesar del aumento del volumen de negociación en un gap de escape, este no resulta tan importante como en el caso del gap de ruptura. De hecho, generalmente el volumen durante un gap de escape tiene un nivel que puede ser promedio o más elevado, pero sin llegar a alcanzar un nivel extremo. Si el volumen es demasiado elevado, esto puede ser una señal de que el gap de escape en realidad es un gap de agotamiento (el cual discutiremos más adelante), el cual indica que existe una elevada probabilidad de que la tendencia actual va a finalizar.
Este tipo de brechas en el precio forma soportes y resistencias en la misma forma exacta que lo hace el gap de ruptura. Otra característica en común que comparten ambos tipos de gaps es que el gap de escape no se cierra a menudo a corto plazo, ya que por lo general a partir de este patrón el precio se dispara con fuerza en el sentido de la tendencia actual. De hecho, si el precio experimenta un movimiento de retroceso y atraviesa el soporte o resistencia formado por el gap de escape, puede ser una señal de que la tendencia se está debilitando – e incluso puede indicar que la brecha en realidad es un gap de agotamiento y no un gap de escape. Por esta razón, si un trader observa que después de un gap de escape el precio retrocede y atraviesa el soporte o resistencia creado por el gap, debe prepararse para cerrar sus posiciones y no quedar atrapado en una tendencia en sentido contrario que puede tener una larga duración.
A veces, el mercado de futuros presenta gaps de escape que son causadas por los límites de negociación impuestas por las bolsas en donde se negocian estos derivados. Para un trader quedar atrapado en el lado equivocado de la tendencia cuando estos límites de negociación en los futuros han sido impuestos debe ser una experiencia traumática. La buena noticia es que un trader también puede quedar en el lado correcto de la tendencia cuando esto ocurre, es decir a favor del gap de escape. Estos no son acontecimientos comunes en el mercado de futuros a pesar de toda la información errónea proporcionada por aquellos que no lo comprenden realmente, y que sólo están repitiendo algo que leyeron en un reporte desinformado.
Gap de agotamiento
Finalmente tenemos el gap de agotamiento, el cual se forma cerca del final de una tendencia y constituye una señal negativa que indica que una tendencia está apunto de finalizar y revertir. De hecho, en muchas ocasiones es la primera señal de la finalización de un movimiento alcista o bajista. Esta brecha en el precio usualmente ocurre durante los últimos impulsos de una tendencia (los cuáles normalmente están marcados por el pánico o histeria), pero también puede ser el punto donde los participantes más débiles del mercado comienzan a actuar y entran o salen del mercado (empiezan a comprar o vender el activo).
El gap de agotamiento generalmente coincide con una filosofía irracional del mercado, como por ejemplo cuando un activo determinado es visto por muchos participantes como “una oportunidad que no puedo perder” o por el contrario como algo que “debe evitarse a toda costa”.
Para identificar una brecha en el precio como un gap de agotamiento o como el último movimiento importante en una tendencia, la brecha debe estar caracterizada por una gran cantidad de volumen de negociación y una diferencia significativa entre el precio de cierre del periodo anterior y el precio de apertura del nuevo periodo. Estas brechas pueden ser confundidas fácilmente con los gaps de escape si el trader no nota el volumen de negociación excepcionalmente alto. La fortaleza de esta señal también es aumentada cuando se produce después de que el precio del activo ya ha realizado un movimiento sustancial importante.
Cuando el gap de agotamiento ocurre durante un extenso movimiento bajista en donde el pesimismo se ha extendido entre los inversores, entonces es casi un estado de pánico generalizado en el mercado, el cual en poco tiempo termina por agotarse conforme los traders empiezan a calmarse. La ejecución de cantidades masivas de ventas para liquidar posiciones alcistas en el mercado en poco tiempo no es algo inusual, y ocurre en periodos de pánico generalizado los cuáles generalmente acaban tan rápido como empiezan. De la misma manera, si se produce un gap de agotamiento durante una tendencia alcista, entonces cierta euforia alcista termina por dominar las transacciones en el mercado por algún tiempo, y los compradores comienzan a comprar en grandes cantidades ya que no quieren perderse lo que consideran que será una operación que les producirá grandes ganancias. Al formarse la brecha al alza lo hace con un gran volumen; entonces se produce una toma masiva de ganancias y la demanda por el activo termina por reducirse dramáticamente. A partir de ahí, los precios comienzan a caer y ocurre un cambio significativo en la tendencia.
Debido a que los gaps de agotamiento señalan un posible cambio de tendencia, por lo general es de esperar que estas brechas sean cerradas nuevamente por el precio en un movimiento en sentido contrario en un periodo de tiempo corto (sobre todo en comparación con otros gaps). Después de que se produce un gap de agotamiento, usualmente el precio se mueve por un tiempo en un rango definido de precios sin una tendencia clara (mercado lateral) y eventualmente comienza a moverse en contra de la tendencia previa y termina por cerrar la brecha. Una vez que el precio cierra el gap, se considera que el patrón se ha completado y constituye una señal de que la tendencia va a revertir.
Probablemente los gaps de agotamiento son los más fáciles para operar y obtener ganancias en comparación con los otros tipos de brechas en el precio. En el gráfico anterior podemos notar una tendencia alcista en la que el precio subió de forma regular durante más de 15 días hasta que se produjo un gap de agotamiento alcista. A partir de ahí el precio inició una tendencia bajista. El volumen de negociación elevado que se produjo durante el gap fue una señal importante de que este iba a ser ya sea un gap de agotamiento o un gap de escape. Debido al tamaño de la brecha y al volumen que casi llegó al doble de su nivel normal, lo que se terminó gestando fue un gap de agotamiento tal como prueba el comportamiento posterior del mercado.
Conclusiones
Existe un viejo dicho que dice que el mercado aborrece el vació y por lo tanto todos los gaps acaban por ser “llenados”. Si bien esto puede tener algún mérito para los gaps comunes y los gaps de agotamiento, mantener posiciones abiertas a la espera de que un gap de ruptura o un gap de escape sea cubierto nuevamente por el mercado puede ser devastador para el trader ya que puede llevar a pérdidas masivas, debido a que estos dos tipos de brechas pueden ser el origen de extensos movimientos de tendencia alcista o bajista que pueden durar mucho tiempo. Así mismo, esperar a que el mercado cierre una brecha en el precio para abrir una posición en dirección de una tendencia puede ocasionar que el trader pierda la posibilidad de sumarse a un gran movimiento. Los gaps son eventos técnicos importantes en la acción del precio y el análisis gráfico, y no deben ser ignorados por el trader. El análisis de candelas japonesas está lleno de patrones que se basan en los gaps para cumplir con sus previsiones y objetivos.