Predicciones del mercado del 2019: ¿Porque los pronósticos estarán poco acertados o totalmente errados?

Cada año, los pronosticadores salen de la clandestinidad. Deberíamos preguntarnos por qué se molestan, dado sus resultados.

Esta es la época del año para los cálculos y predicciones anuales de los estrategas y analistas de los mercados, que ilustran poco más que lo único que muchos de estos “expertos” saben en realidad es lo que complace a sus empleadores y que sus poderes de pronóstico son inexistentes. Y, sin embargo, llenos de aplomo y confianza, explican qué acciones comprar, cuándo se producirá una recesión, qué va a hacer la Reserva Federal y cuándo va a colapsar el mercado. (A decir verdad, la última es menos una predicción en estos días y más un caso de reporte económico en tiempo real).

Estos pronósticos son, en su mayor parte, ejercicios de futilidad.

Pero primero, un recordatorio: el problema con los pronósticos de los mercados va más allá de su mera falta de precisión. La crítica de muchos es con respecto a las fallas cognitivas y filosóficas subyacentes que están asociadas con toda la industria del pronóstico: la falta de humildad, el supuesto de un conjunto de habilidades claramente no evidenciado, y el más condenatorio de todos, la falta de reconocimiento de la aleatoriedad del mundo en general.

Lo más insidioso son los pronósticos diseñados para separar a los traders principiantes de sus dólares.

Entonces, para recordarle por qué debería ignorar los pronósticos de 2019, consideremos algunas de las predicciones más notorias de 2018:

Pronóstico del 2018 de Bitcoin

El espectro de predicciones se extendió de lo sublime a lo criminalmente negligente a lo absolutamente insano. El asunto se puso tan mal que se creó un sitio web para dar seguimiento a todas las profecías de Bitcoin. Nick Maggiulli señala que los sistemas caóticos no pueden predecirse, ya que están sujetos al problema de los tres cuerpos (y sus variantes).

El pronóstico de Tom Lee de Fundstrat para 2018 de un valor de $25,000 para Bitcoin se redujo el mes pasado a $15,000 para fines de año. (La criptomoneda más popular recientemente se negoció en aproximadamente $3,650). Por tonto que parezca, este pronóstico fue modesto en comparación con el resto. Michael Novogratz pronosticó que “$40,000 era posible para fines de 2018.” Kay Van-Petersen de Saxo Bank predijo que Bitcoin aumentaría de $50,000 a $100,000 para fines de este año. John McAfee, el excéntrico empresario de tecnología, declaró que Bitcoin podría llegar a $1 millón para 2020. Por su parte, Tim Draper duplica a McAfee, llegando a $2 millones.

Todos estos casos son notables no solo por estar equivocados, sino por su absoluta imprudencia.

Eventos geopolíticos para el 2018

Este año no debería haber sido tan difícil de pronosticar; el partido fuera del poder en Estados Unidos  tiende a ganar en las elecciones de medio término. Con los índices de aprobación del presidente Donald Trump muy por debajo del 50 por ciento, un cambio en la Cámara de Representantes no fue del todo inesperado. Sin embargo, aún vimos pronósticos absurdos que decían que “la economía en auge de Estados Unidos aplastará a los demócratas en 2018”.

Otros hicieron pronósticos igualmente equivocados. Los editores de Fortune escribieron: “Los demócratas tendrán los números en las elecciones intermedias de 2018, pero predecimos que no será suficiente para que tomen la Cámara”. Y ocurrió lo contrario.

A pesar de la creciente participación en las primarias, también se advirtió a los demócratas que “sus votantes no aparecerán” el día de las elecciones. Eso fue según Vox en septiembre. Vox también advirtió que los votantes más jóvenes podrían quedarse en casa en lugar de votar, y que “la Ola Azul se estaba estrellando”. Al final resultó que ocurrió exactamente lo contrario.

El oro en el 2018

Antes de que todos los “expertos” pasarán del oro a Bitcoin, el metal precioso también se convirtió en objeto de múltiples pronósticos errados. Peter Schiff ha estado pronosticando que el oro subirá  a $5,000 por onza desde al menos el 2010, basado en su predicción de un enorme aumento en la inflación. (Ahora se cotiza a alrededor de $1,238). Nada de esto ocurrió. Jim Rickards, ex asesor general de Long-Term Capital Management, predijo un precio objetivo de $10,000. Para ser justos, dijo que lo mismo sucedería a fines de 2017. Jim Rogers se enfadó con todos, y declaró en agosto que “el oro podría convertirse en una burbuja”. No lo ha hecho. Pero al mercado seguramente le quedan muchos años de vida, así que tal vez pueda hacerlo.

Mercados de valores para el 2018

Las previsiones sobre el mercado de valores suelen provenir de estrategas de empresas más grandes, por lo cual usualmente cubren un rango de predicciones más modesto que va desde un poco demasiado alcista a un poco demasiado bajista. El riesgo para sus carreras tiende a mantener a los estrategas del mercado de valores más circunspectos que los enfocados en Bitcoin y oro. Por lo general, estos pronósticos se refieren a ganancias continuas o crecimiento sólido, o resultados poco alentadores y correcciones modestas, sin caer en pronósticos extravagantes ni nada exagerado. Sin embargo, también hay analistas de estos mercados que caen en la misma línea que los pronosticadores de criptomonedas.

Hay demasiados de estos analistas para tener en cuenta, pero quizás uno de los más notable sea el ex director de presupuestos de la Casa Blanca, David Stockman, quien se ha mantenido principalmente bajista desde hace años: predijo un desplome del mercado en 2012, 2013, 2014, 2015, 2016, 2018 y 2019. Por supuesto que sí hace la misma predicción año con año, incluso si finalmente se hace realidad, es poco probable que tenga crédito por ello.

Incluso los guardianes oficiales de la economía, los bancos centrales, tampoco obtienen los mejores resultados en cuanto a sus pronósticos.

Conclusiones

El mejor consejo que puede recibir un trader o inversor es realizar su propia investigación y análisis antes de considerar la inversión en un mercado determinado. Pueden consultar los pronósticos de analistas reconocidos, pero con cierto recelo. Si fueran tan buenos en su labor, probablemente se dedicarían principalmente a la labor de trading e inversión por su cuenta, donde estarían ganando toneladas de dinero.

También pueden aplicar otro consejo cuando vean un pronóstico: márquelo en un calendario o programa de recordatorio, luego vuelva a leerlo un año después. Esto le permitirá revisar si fue bueno o malo. Es un gran ejercicio para saber que tan buenos son estos gurús de los mercados.

La mayoría de las veces, los resultados revelan por qué gastar demasiado tiempo prestando atención a las previsiones de los llamados expertos es en su mayor parte un esfuerzo perdido.