Continuando con la serie de artículos sobre sistemas de trading y gestión monetaria en este artículos trataremos de responder algunas de las preguntas más importantes que todo trader se plantea a la hora de operar en el mercado como por ejemplo:
- ¿Cuáles son las condiciones ideales para abrir una posición?
- ¿Qué porcentaje del capital de inversión debo arriesgar en cada operación?
- ¿Cómo manejar una posición que comienza a tener pérdidas?
- ¿En que punto debo cerrar una posición que está teniendo un gran beneficio?
- ¿Es conveniente aumentar el tamaño de la posición de una operación después de haber tenido una gran pérdida?
- ¿Se debe cerrar una posición ganadora por completo de una sola vez o es mejor hacerlo poco a poco?
- ¿Después de haber tenido una gran ganancia es conveniente aumentar el tamaño de la posición o mantenerlo igual?
- ¿Cuanto capital debo usar para invertir en los mercados?
Para responder adecuadamente a estas preguntas debemos hacer uso de la gestión monetaria ya que es un elemento fundamental si queremos mantenermos operando en el mercado por mucho tiempo y no perder nuestro capital en unas pocas operaciones. Mediante la gestión monetaria podemos aumentar la probabilidad de que nuestro sistema de trading sea exitoso a lo largo del tiempo. Si no aplicamos las reglas básicas de la gestión de riesgo lo único que estamos haciendo es poner en peligro nuestro capital de inversión el cual seguramente nos costó mucho acumular. Como sabe cualquiera con algo de experiencia en los mercados financieros, estos suelen tener un comportamiento errático y en ocasiones volátil, con cambios fuertes y repentinos en uno u otro sentido que le pueden ocasionar a los inversores grandes pérdidas si no han tomado las debidas precauciones y tienen posiciones abiertas al lado contrario del movimiento del mercado.
Este tipo de movimientos en muchas ocasiones constituye más una norma que una rareza, por lo cual son parte de la naturaleza de los mercados y constituyen un componente de su riesgo inherente. Por tal motivo, si un trader sufre pérdidas fuertes debido a estos movimientos se debe más que todo a su falta de preparación y cuidado. Por tal motivo se hace necesaria una buena gestión monetaria, cuyo fin es el de evitar que un movimiento contrario del mercado o un error en el análisis del mismo ocasiones que el inversor pierda un alto porcentaje de su capital. Básicamente la gestión monetaria nos permite administrar nuestro capital de inversión de manera tal que podamos operar con el menor riesgo posible.
De esta manera la gestión monetaria viene a ser por así decirlo la logística del trading ya que nos permite una buena administración de recursos. Como todos sabemos sin una adecuada administración de los recursos que disponemos todo emprendimiento puede fracasar facilmente si se nos presentan condiciones adversas. Resulta evidente que lo primero que necesita cualquier operador es contar con las mayores probabilidades de exito a su favor, lo cual viene a ser un buen sistema de trading. De esta forma, si cuenta con un sistema que le permita tener más aciertos que errores a la hora de operar en el mercado, una buena gestión monetaria le permitirá acumular ganancias de manera más segura y regular, de manera que evite la posibilidad de perder su capital en unas cuantas operaciones debido a movimientos contrarios del mercado.
Aún si el operador emplea un mal sistema de trading que le hace abrir más posiciones perdedoras que ganadoras, el uso de un buen sistema de gestión monetaria le dará la posibilidad de perder su capital más lentamente, si bien al final probablemente termine perdiendo todo. Finalmente, si el operador utiliza un sistema de trading que le permita acertar en un 50% de sus operaciones, la gestión monetaria le puede permitir que el beneficio obtenido cuando gana sea superior a las pérdidas producidas cuando se equivoca, de tal manera que al final tenga un saldo positivo en su cuenta y gane dinero.
Seguidamente, vamos a explicar las reglas básicas de gestión monetaria que todo trader debe aplicar para que su sistema de trading sea exitoso:
A. Hacer una planificación cuidadosa de las estrategias de operación, sobre todo en lo referente a las acciones a llevar a cabo si el mercado se mueve en nuestra contra.
Lo primero que todo operador debe hacer antes de abrir una posición y arriesgar su dinero es determinar en que momento preciso va a cerrar su posición si el mercado se mueve en su contra. Lo ideal es que el trader planear con anticipación que es lo que va a hacer y porqué, ya que solo de esta manera podrá tener confianza completa en sus decisiones y evitará la tentación de cambiar su estrategia a cada momento. Para un trader profesional no tiene sentido unicamente tratar de adivinar si el mercado va a subir o bajar, ya que esto sería como jugar la lotería o cualquier otro juego de azar por lo cual las probabilidades de ganar son bastante similares a los de estos juegos, lo cual a la larga solo nos puede causar pérdidas.
La naturaleza humana hace que nos concentremos exclusivamente en los aspectos positivos del trading y lleguemos a ignorar los riesgos inherentes. Los operadores novatos comenten el error de dedicarse a calcular de antemano unicamente cuanto dinero van a ganar con sus operaciones, llegando en algunos casos incluso a imaginarse lo que harán con ese dinero. Estos traders olvidan que la operativa en los mercados financieros es basicamente un juego de probabilidades en el cual no hay nada seguro. Por supuesto que se puede obtener mucho dinero en el mercado, pero para esto es necesario emplear estretegias que nos permitan poner las probabilidades a nuestro favor. Estas estrategias deben contar con defensas o planes de contingencia que eviten la pérdida total de nuestro capital cuando por un motivo u otro nuestras operaciones no salen como deseamos. Esto hace necesario que meditemos con antelación lo que vamos a hacer y que medidas vamos a tomar si estamos equivocados.
B. Especular unicamente con el capital máximo que estamos dispuestos a perder.
Esta constituye una regla básica la cual no debería necesitar mayor explicación, sin embargo no son pocos los inversores que llegan a perder mucho más de lo que pueden soportar su estado financiero debido a que creen que los mercados financieros constituyen una fuente mágica donde pueden obtener fácilmente todo el dinero que necesitan para salir de sus deudas y volverse nuevamente solventes. Se trata en estos casos de personas que arriesgan dinero que en realidad no pueden darse el lujo de perder y que finalmente acaban perdiendo debido a la naturaleza misma del mercado y la presión psicológica a la que están sometidos por tratar de ganar dinero a como de lugar.
Es bien sabido por los expertos, que por alguna razón (de índole psicológica seguramente), los operadores casi nunca ganan dinero en el mercado cuando tienen necesidad real de ganar. De hecho, las personas que realizan operaciones bajo la presión de tener que ganar con desesperación en la mayoría de los casos pierden. Esto puede deberse a tres razones:
- La presión psicológica hace que tomen decisiones apresuradas, emocionales y sin ninguna planificación, ya que bajo estas condiciones mentales la gente generalmente carece de serenidad y claridad de ideas.
- Con tal de obtener ganancias con rapidez, apalancan demasiado sus posiciones, lo cual los expone a termina cerrando sus posiciones con grandes pérdidas ante el menor movimiento adverso del mercado.
- Probablemente tratan de sacar una ganancia excesiva de sus operaciones ganadoras. Debido a la urgencia que sienten por ganar dinero, tratan de sacarle más dinero a operaciones que probablemente no pueden dar más, por lo cual no realizan la toma de beneficios en el momento oportuno.
Cuando un operador arriesga un capital que no puede darse el lujo de perder, entran en juego todas las emociones negativas que lo pueden conducir al desastre con suma facilidad. Si una persona va a invertir en el mercado, debe asegurarse de arriesgar únicamente una cantidad de dinero cuya pérdida no lo coloque en una situación desesperada económicamente hablando.
C. Solo debe arriesgarse un porcentaje máximo fijo del capital disponible para inversión en cada operación individual.
Si bien no existe un sistema de trading perfecto que nos asegure operaciones ganadoras todo el tiempo, las leyes de probabilidades nos dicen que si contamos con un buen sistema el cual esté conformado por las estrategias más adecuadas para los diferentes escenarios del mercado y se controla el riesgo siguiendo los principios básicos de la gestión monetaria, podremos llegar a acumular ganancias bastante impresionantes en el transcurso del tiempo. En este caso, un buen sistema de trading debe poner las probabilidades a nuestro favor para ser rentables a largo plazo. La razón por la cual los casinos a largo plazo siempre salen ganando es que emplean un buen sistema de trading que pone las probabilidades a su favor en contra de los jugadores. Si bien un jugador puede tener suerte una, dos, tres o más veces, en algún momento el casino terminará venciendolo y tomando su dinero ya que las probabilidades hacen que tenga todas las de ganar.
Con respecto a la operativa en los mercados financieros ocurre algo similar, nuestro sistema de trading debe poner las probabilidades a nuestro favor aunque sea ligeramente. Los expertos afirman que un buen sistema de trading es aquel que nos asegura un 50%-60% de operaciones ganadoras en el mercado el cual nos puede brindar grandes ganancias, claro está si sabemos como administrar nuestro capital. Aunque tengamos un buen sistema de trading, sino contamos con un buen esquema de gestión monetarias tarde o temprano acabaremos perdiendo dinero. En los casinos, los buenos apostadores saben cuanto apostar en cada jugada, cuando retirarse y en general como administrar su dinero de tal manera que no acaben perdiendo todo en unas cuantas jugadas. Por el contrario, los malos apostadores, aunque cuenten con un buen sistema terminan sufriendo grandes pérdidas ya que no controlan adecuadamente el riesgo.
Cualquier persona con experiencia en los mercados sabe que no existe un sistema que garantice un 100% de operaciones ganadoras. Por bueno que sea el sistema de trading, en algún momento producirá operaciones perdedoras ya sea que se base en análisis técnico o fundamental. De esta manera, se hace vital el uso de los principios básicos de gestión monetaria para no perder nuestro capital en unas pocas operaciones cuando el sistema de trading produzca señales erróneas.
Un aspecto fundamental de la gestión monetaria es determinar que porcentaje de nuestro capital total de inversión vamos a arriesgar en cada operación. De aquí surge la pregunta: ¿Qué porcentaje es el correcto? Muchos inversores deciden arriesgar únicamente una cantidad fija de dinero en cada inversión o bien un número fijo de contratos o títulos dependiendo del instrumento con que estemos operando. Por lo general, los expertos afirman que no debe apostarse más del 10% del capital disponible en cada operación.
D. Realizar una operación únicamente cuando el beneficio potencial sea grande y el riesgo pequeño en comparación.
Un operador que busca ser rentable a través del tiempo debe buscar sobre todo operaciones con un elevado beneficio potencial y un riesgo que sea pequeño en comparación. En esta situación el inversor debe decidir que riesgo desea asumir y establecer las condiciones bajo las cuales cerrará sus operaciones si el mercado llega a moverse en su contra. No obstante dada la naturaleza errática del mercado, es bastante difícil establecer con exactitud el riesgo de una operación.
El inversor debe tomar en cuenta que si sale excesivamente rápido del mercado ante el menor movimiento en contra, puede estar cometiendo un error ya que puede tratarse únicamente de una corrección menor dentro de una tendencia más grande que había conseguido visualizar correctamente. De esta forma, el operador debe tratar de buscar condiciones de mercado bajo las cuales los movimientos de corrección en contra no sean tan grandes como para hacerle creer que estaba equivocado y le hagan cerrar sus posiciones. De lo que se trata entonces, es de elegir únicamente operaciones de bajo riesgo y de un beneficio potencial elevado, si bien esto es más fácil decirlo que hacerlo. Además esto es algo relativo, ya que el nivel de riesgo que un trader está dispuesto a correr generalmente es diferente al que corre otro ya que con seguridad tienen estilos de trading distintos.
Lo que debe evitarse a toda costa es realizar de manera constante operaciones en las cuales el riesgo supere el beneficio (operaciones en las que se puede perder más de lo que se puede ganar), algo que no pocos inversores hacen. Esta práctica a largo plazo acabará con nuestro capital ya que las ganancias no podrán compensar las pérdidas que serán siempre de mayor magnitud.
E. Manejar el tamaño de nuestras posiciones en relación con las probabilidades de éxito de las operaciones, de forma tal que se asegure un beneficio medio grande y una pérdida media relativamente pequeña.
En esta serie de artículos hemos visto que incluso un operador que usa un sistema de trading que tenga un 50% de aciertos (lo que es igual a un 50% de operaciones perdedoras), aún así tiene la oportunidad de ser rentable a largo plazo si logra que las ganancias de sus operaciones ganadoras sean mayores a las pérdidas de las perdedoras. Esto se puede conseguir graduando el tamaño de las posiciones en función del grado de confianza que tengamos en cada operación que realicemos.
Un operador simplemente no puede arriesgar la misma cantidad de dinero en cada operación ya que no todas tienen el mismo nivel de riesgo asociado. Por este motivo debemos ser flexibles y variar el tamaño de nuestras posiciones en el mercado de acuerdo a las condiciones del mismo. Esta resulta una cualidad muy importante para todo trader que desea ser exitoso en el mercado, ya que sirve para disminuir el riesgo en las operaciones perdedoras y para incrementar los beneficios en las operaciones que nos están produciendo ganancias.
Se ha mencionado en este artículo en más de una ocasión, que uno de los elementos más importantes de la gestión monetaria es limitar de manera más o menos objetiva el tamaño de nuestras posiciones, de manera que la cantidad de dinero arriesgada en cada operación sea sumamente pequeña en relación al capital disponible. Sin embargo, en ocasiones el mercado presenta oportunidades realmente buenas y de alta probabilidad de exito que ameritan arriesgarse un poco más y aumentar el tamaño de nuestra posición. Puede ocurrir claro está que el mercado empiece a moverse en contra nuestra, pero si esto ocurre cerramos rápido la posición y asumimos una pérdida pequeña.
En ocasiones, cuando las probabilidades están fuertemente de nuestro lado, es conveniente tener algo de agresividad y llegar incluso a incrementar el apalancamiento, claro está con medida. Por supuesto que este tipo de oportunidades no aparecen todo el tiempo, por lo cual el inversor debe elegir con mucho cuidado las operaciones en que puede arriesgar más de lo que hace normalmente. Al mismo tiempo debe tratar de evitar saltar e invertir más de lo normal ante cualquier señal positiva del mercado, para esto debe esperar que se den todas las condiciones adecuadas.